La crisis económica, uno de los temas que le permitió a Javier Milei sumar los votos para ganar el balotaje, hoy es el tema donde giran todos los tejes y manejes del poder y como es de esperar es la preocupación cotidiana del pueblo argentino.
La semana pasada, lo que parecía el gobierno de LLA con Milei a la cabeza, es hoy un híbrido con el macrismo donde éste último parece estar copando la mayoría de los resortes claves del gobierno y haciendo abandonar, en apariencia, las principales propuestas de Milei incluida su dolarización.
Todos los “nombrados” por el presidente electo han caído, salvo Cuneo Libarona en justicia. La primera en caer, Carolina Píparo (con fuertes ligas con Macri), que ya había llenado su wikipedia con su nombramiento en la ANSES, fue reemplazada por el cavallista Osvaldo Giordano, hombre del cordobés Schiaretti al igual que un hombre del mismo palo ocupará transporte.
Sin entrar en el triangulo de disputa entre Milei, Villarruel y Pato Bullrich, son muy preocupantes las supuestas designaciones en economía, hoy corroboradas en un alto porcentaje con el viaje a EEUU de Milei junto a Luis “Toto” Caputo y el embajador yanqui Stanley.
El problema de la LELIQ es lo que parece quitarle el sueño a Milei, tanto es así, que Macri le impuso como Ministro de Economía a su creador y “genio” de las finanzas, fugador serial, y tomador de la deuda a 100 años, Luis “Toto” Caputo. Éste último junto con Sturzenegger, diseñaron en 2018 la Letra de Liquidez del Banco Central (LELIQ) como una manera de contener los pesos circulantes y achicar el efecto de migración al dólar en momentos de liberación del cepo cambiario, elevando las tasas de interés en los depósitos a plazo fijo. Una medida que significó un gran negocio para los bancos y financieras como únicas entidades que podían acceder a la compra de las letras y encareciendo tremendamente el acceso al crédito para lxs trabajadorxs y Pymes. Luego de más de 5 años de funcionamiento, es un globo que como bien dice el Presidente electo, puede generar hiperinflación si no se empieza a generar la desaparición de este sistema.
Como las LELIQ son los encajes de los movimientos financieros de los bancos, o sea el ahorro del pueblo y las empresas, para estos genios habría solo dos formas de salir. Una es un plan bonex (como el que implementaron Cavallo-Menem en la convertibilidad) y confiscar los ahorros y la otra es el endeudamiento externo. Por los movimientos de las últimas 48 hs, parece que el elegido es el endeudamiento, para eso llevó a Caputo a negociar en EEUU, el mismo que se fumó U$S 15000 millones y armó las LELIQ, como dijo Milei hace un tiempo.
A nivel popular el horno no está para bollos. La macrización del gabinete del electo está produciendo malestar en sus votantes, que con bronca por la situación económica empiezan a ver la asociación con Macri como traición. Esta situación, sumada a la pobreza que abarca al 42% de la población y de lxs cuales un porcentaje enorme son trabajadorxs en actividad y a pesar de que el elegido asegura que irá a fondo, aparece un desplazamiento de la salida de las LELIQ hacia el endeudamiento para no tocar los depósitos. Esto es también un supuesto, como operativa de un gabinete supuesto.
El endeudamiento por venir, es otro tema en el que “Toto” es un experto. Hace falta recordar, por si acaso, la deuda externa que estos genios contrajeron y fugaron durante el gobierno de Macri. 45000 millones de dólares que desaparecieron y junto con eso nos dejaron el globo, transformado en dirigible de las Letras de Liquidez. Esa deuda es un fuerte lastre que profundizó la crisis actual, deuda que Massa a ido pagando con más deuda pero con otros, usando los prestamos de intercambio (swap) de China.
Aunque se rumorea sobre un crédito de “resistencia” que otorgaría el FMI al gobierno electo, todo apunta a que se pedirán préstamos a privados, esos que piden garantías para prestar dinero, como en un alquiler por ejemplo, pero en este caso serían las joyas de la abuela como se decía en la época en que Menem privatizó todo. De estas joyas, las más preciadas son YPF, AYSA, FERROCARRILES y el abultado fondo de garantías de la ANSES (fondo de jubilaciones). Con la daga clavada de la deuda con el Fondo, cualquier otra deuda contraída es muy posible que por imposibilidad de pago, se ejecute la garantía y se entreguen las joyas del Estado.
Con el triunfo de Milei el pueblo ha perdido la batalla cultural. Una Vicepresidenta electa procesista, negacionista, un Presidente electo que avala esa situación, un Macri que le propone a los jóvenes, cual camisas negras de Mussolini, detener a los Orcos, llamando así despectivamente a trabajadorxs y organizaciones sociales que luchan por sobrevivir. No podemos olvidarnos del ataque a los pueblos originarios por Pato Bullrich durante el gobierno de Macri y en la represión de Morales al Pueblo jujeño.
Esto fue parte del eje electoral, represión al que se oponga, al que adscribieron muchos de los votantes de LLA, porque se puso al populismo como su enemigo y por consecuencia también a los planes y subsidios sociales, los contratados por el Estado, los supuestos ñoquis. Fueron declarados enemigos los pobres, aquellos que salieron a la calle porque sus magros ingresos los licuo la inflación y sus salarios cayeron más de 3 veces frente al dólar. Un centro que trabajaron a fondo los medios dominantes, junto a la idea de hacerle pagar a la “casta política” el ajuste, representado en liquidar los bienes del Estado como expresión de esa supuesta casta corrupta.
Se viene más primarización de la economía, con más entrega de recursos naturales. Para seguir dando la batalla política y cultural, se impone defender y recuperar lo que nuestro pueblo ha conquistado en 40 años de lucha democrática, tenemos que iniciar un movimiento que estreche todos nuestros lazos soberanos exclamando abajo el acuerdo con el FMI.
YPF, AYSA, FERROCARRILES, RIOS y MARES, PETROLEO, LITIO, EL MEDIO AMBIENTE, deben ser defendidos por la lucha popular. Ni un solo trabajadxr despedido, no al achicamiento del Estado. De las LELIQ se sale con una política industrialista soberana, con impuestos a las grandes fortunas, bancos y monopolios, grandes beneficiarios de la pandemia y de la crisis inflacionaria actual; con generación de trabajo y salarios dignos. NINGÚN TRABAJADXR POBRE EN LA ARGENTINA.