Con la consigna “Para quedarnos en Tierra del Fuego”, fue presentado el partido “Iniciativa por la Unión” para las elecciones de diputados nacionales fueguinos. Esta nueva lista es impulsada desde la Unión de Gremios y Jubilados Estatales de la isla, un amplio agrupamiento conformado en la lucha contra el brutal ajuste de la gobernadora Rosana Bertone. En una provincia donde la desocupación subió del 5,9% al 7,7% según el propio INDEC, este instrumento busca expresar en las elecciones el castigo a la política de despidos, recortes salariales, quita de derechos jubilatorios, impuestazos y tarifazos, apuntalada también por el gobierno nacional.
Integran este nuevo partido compañeras y compañeros despedidos de las fábricas, trabajadores estatales, privados y de la fábrica recuperada Renacer, jubilados, pequeños y medianos comerciantes y emprendedores, personas con discapacidad, trabajadores precarizados de los Planes PEL y desocupados.
La lista lleva como candidatos titulares al abogado Federico Rauch y a Verónica Andino, actual secretaria adjunta del sindicato docente SUTEF. Como suplentes se presentan José Gómez y María Gómez. Rauch es un abogado destacado en la isla, y entre las causas que sigue representa a los 17 docentes con pedido de exoneración. José Gómez es secretario general del gremio estatal AFEP y una de las víctimas de detenciones arbitrarias ocurridas en 2016 en el contexto del acampe frente a la Casa de Gobierno.
La “Iniciativa” es un que no se reduce a la disputa electoral, sino para todos los planos de la disputa política. En diálogo con Vamos!, Horacio Catena –secretario general de CTA-A fueguina y uno de los principales referentes del agrupamiento– nos explica los motivos que llevaron a la conformación de esta nueva opción.
–¿Cómo concebís al partido “Iniciativa por la Unión”?
–No es solo un frente político electoral, sino que es un instrumento político para disputar en todos los terrenos, incluido el electoral, frente a las distintas fuerzas políticas que han garantizado y garantizan el ajuste en la provincia y en la Argentina. Porque, con honrosas excepciones, el ajuste en nuestro país no pasa sin complicidad sindical y sin complicidad política. A partir de haber hecho un tránsito de mucho tiempo junto con las distintas organizaciones en el ámbito gremial, se desarrolló el año pasado un conflicto que fue esencialmente político, en el transcurso del cual tuvimos una experiencia electoral por los representantes de la obra social y la caja de previsión. Y la conclusión fue que había que disputar en todos los terrenos, incluido el electoral.
–¿Cómo fue el debate hacia el interior del gremio para la conformación de este instrumento?
–El debate parte de que nosotros intentamos, a veces con más y a veces con menos éxito, que el conjunto de los trabajadores de la educación protagonicen los procesos y sean parte activa de los debates y las resoluciones. Y en realidad el puntapié inicial lo dan las escuelas, porque te dicen “los vamos a castigar en las elecciones”, “ya van a venir a buscar los votos”. Entonces hay que buscar una formulación para el castigo que la gente quiere dar también en el terreno electoral, además de cuando lucha y cuando marcha. Y como en la Unión de Gremios hay dirigentes de todas las extracciones políticas, tomamos la decisión de unificar a partir de corrientes políticas diversas pero de objetivos comunes. Entonces también el empuje a tomar la decisión viene de las escuelas. Lo que intentamos hacer es sintetizar esas ideas y expresiones y cristalizarlo en algo.
–¿Fue complejo llevar esto a debate en asambleas y plenarios?
–El debate más complejo es porque los compañeros no quieren que el gremio pierda la esencia de múltiples miradas y múltiples corrientes y que sea la herramienta de lucha y organización de los trabajadores. Por eso nosotros decimos que es una disputa en todos los terrenos. Como en su momento fuimos a dar una disputa política en un terreno adverso en el que somos ínfima minoría como la OIT, en el que no creemos que vaya a solucionar todo pero que es un lugar donde tenemos que ir. O como cuando participamos en una marcha nacional, en donde hay corrientes políticas con quienes durante doce años confrontamos, pero que también teníamos que dar la disputa para que esté el reclamo consecuente de nuestra organización. Ahora tenemos que empujar, a la par de la organización y el armado de esta herramienta política, la lucha salarial. Porque por más que nos vaya bien en agosto y muy bien en octubre, el problema es que hay que romper el congelamiento que impone el decreto de Bertone en términos salariales.
–El resultado de las elecciones del IPAUSS y la consulta y juntada de 22 mil firmas para que se trate en la legislatura el paquete de leyes, ¿los fortaleció y los llevó a pensar en profundidad esta iniciativa?
–Son indicadores. No es que porque armás un partido todo eso se convierte en votos a un partido. Pero es una orientación que te va haciendo la gente de por adónde va la cosa. Y está en nosotros poder sintetizar eso o no. Obviamente que hay muchos que analizan la política quizá desde otro lugar, que ven en eso un potencial que a lo mejor algunos no vemos y debemos aprender. Pero obviamente que las elecciones del IPAUSS fueron un indicador claro porque había fuerzas políticas concretas que van a participar ahora en las elecciones y que jugaron en las elecciones del IPAUSS porque también querían medir el descontento al gobierno. No es que jugaron por otra cosa. Jugaron para pasarse factura entre ellos. Pero también querían medir quién capitalizaba el descontento con el gobierno.
–¿Cuáles son los principales lineamientos de este frente?
–Primero, que vamos a pelear para que sea un movimiento que tenga resoluciones horizontales. Una práctica de resoluciones en asamblea, debate franco, opiniones diversas. Luego vas conformando un programa que tiene una base común que es la defensa de la soberanía popular en la isla. Y no hay soberanía popular sin una ley de promoción económica e industrial como la 19.640. Y precisamente los paquetes de leyes de Bertone atacan esta ley con la creación de la AREF (Agencia de Recaudación Fueguina). Entonces eso va conformando un plafón de gente que venimos luchando desde hace mucho tiempo desde lugares diversos. Pero con un mismo método que es la cosa horizontal, democrática, participativa y donde los dirigentes nos venimos sometiendo a las decisiones de las bases. Así que iremos viendo y también aprendiendo.
–¿Qué está ocurriendo en este momento en la provincia?
–Lo que sucede no es muy distinto a los que sucede en el resto del país. He escuchado informes de San Luis donde también se ha producido la quiebra de diversas empresas y se tomaron políticas distintas. Lo que sucede en la provincia es la conjunción o armonización de dos políticas, la nacional y la provincial, en un mismo sentido que es vaciar a la provincia e ir al viejo anhelo de provincia chica. La situación insular de nuestra isla genera un debate que no se da: el lugar estratégico de Ushuaia y de Río Grande por capital de Malvinas y de puerta de ingreso a la Antártida. Pero nos quieren llevar a un escenario de desarrollo del turismo “clase A”, turismo internacional, un turismo para pocos donde se enriquezcan mucho y se lave mucho. Y donde haya poca población, cosa de poder instalar cómodamente una base militar yanqui o de otro imperialismo para el control de una zona estratégica en un momento tan delicado. No es un tema menor el rol que tiene el Atlántico Sur, la base que tienen los ingleses en Malvinas, y la disputa de los reservorios de agua dulce tanto de Tierra del Fuego como de la Antártida, y el paso natural Atlántico-Pacífico.
Candidatos y candidatas de Iniciativa por la Unión
Federico Rauch: Abogado. Patrocinante de siete mil ciudadanos de la isla que demandaron a las automotrices por fraude. Estudió y advirtió públicamente las consecuencias del paquete de leyes fiscales, previsionales y salariales sancionado el 8 y 9 de enero del 2016.
Verónica Andino: Docente de Río Grande, secretaria general adjunta provincial y secretaria general de la Seccional Río Grande del SUTEF. Luchadora incansable por la defensa de los derechos laborales, de las mujeres y de las personas con discapacidad.
José Gómez: Empleado de la administración pública de la provincia y Secretario General del sindicato AFEP. Siempre del lado de los trabajadores, denunciando y luchando contra la corrupción de cada gobierno.
María Gómez: Enfermera del Hospital Regional de Río Grande, recientemente jubilada. Dirigente del sindicato de enfermeros SUEF. Líder entre sus compañeros del hospital por su compromiso gremial.