GUSTAVO PETRO OBTUVO MÁS DEL 40% DE LOS VOTOS
Habrá segunda vuelta el 19 de junio
La Registraduría Nacional del Estado Civil de Colombia informó este domingo que los candidatos Gustavo Petro y Rodolfo Hernández, pasan a segunda vuelta presidencial tras el 97,36 por ciento de las mesas escrutadas en el preconteo no vinculante.
De acuerdo a la autoridad colombiana, Gustavo Petro de la alianza Pacto Histórico obtiene 8.333.338 de votos (equivalente al 40,33%) y Rodolfo Hernández de LIGA logra 5.815.377 sufragios (28,14 %), lo cual conduce que ambos disputen la segunda vuelta. Aún quedan miles de mesas sin contar.
Por su parte, el candidato del uribismo (por Álvaro Uribe) el ultraderechista Federico Gutiérrez de “Equipo por Colombia” solamente alcanza 4.939.579 de votos (23,90 %), mientras que Sergio Fajardo de “Centro Esperanza” obtuvo 871.081 de votos (4,21%).
Se abre una situación muy delicada, por un lado porque hay que remontar el posible acuerdo entre la derecha y la ultradecha para arrebatarle el triunfo a la Alianza “Pacto Histórico” de Gustavo Petro y quedarse nuevamente con el gobierno. La derecha cuenta con un poder formidable en el país, apoyado sin tapujos por los EEUU.
Por otro lado es una situación extremadamente delicada donde el fraude estará a la orden del día, “amparado” por el resultado de “las dos derechas” que se juntaran, pero tampoco se puede descartar el accionar impune de las bandas armadas que han sido protagonista en los meses previos a las elecciones y en la propia campaña electoral.
El triunfo del “Pacto Historico” trae esperanzas en el pueblo en una elección histórica donde el pueblo deberá ganar las calles para garantizar la voluntad popular que dice basta al hambre y la pobreza, a las persecuciones, encarcelamientos y asesinatos de aquellxs que desafían el régimen.
Es una parada muy dura en un país férrea y sanguinariamente gobernado mediante el “terrorismo de Estado” por la oligarquía hace dos siglos, al que EEUU considera de su propiedad custodiado por las nueve bases militares desplegadas en ese territorio.
Pero las esperanzas de un pueblo martirizado que levanta la cabeza están en marcha.
Acompañamos con el corazón y la fuerza esas esperanzas para regarlas en nuestra América Morena.