Las garantías democráticas están siendo cercenadas de manera vertiginosa.
La presión de un sector del poder concentrado sobre la Corte Suprema (esta que avala los DNU y estafas que violan la Constitución Nacional) para que ratifique la condena y proscriba a Cristina Kirchner, dictada por jueces y fiscales que juegan al fútbol en la quinta de los Macri, luego de que esta anunciara su candidatura en C5N y que días después se reuníera con Kicilliof donde acordaron un plan de trabajo en unidad en las próximas elecciones en toda la Provincia de BsAs, encendió las alarmas de aquellos sectores del poder que vienen trabajando la división del campo popular en el distrito mas importante del país, y que dias atras habian pedido una reunión con el gobernador.
Entre el ejecutivo que no encuentra candidatos, en una unidad con el Pro que aún no cierra y encuestas que dan un triunfo en la tercera sección electoral donde se presentaría CFK, obligó al ejecutivo nacional y la derecha a jugar fuerte para impedir un triunfo que afecte su plan más ambicioso como el de una derrota del peronismo y aliados, de manera de terminar de consolidar el proyecto devastador de los dueños del poder hoy gobernado por la ultraderecha.
Vienen por todo como un fin de ciclo y despegue de un modelo de despojo nacional y sometimiento del pueblo.
El autoritarismo avanza a la medida que avanza esos objetivos. El desalojo del Instituto Nacional de Investigaciones, Juan Domingo Perón y detención de Juan Grabois y otro militante en las últimas horas, ordenada directamente desde el poder ejecutivo sin mediar la justicia, marca el ritmo de los acontecimientos donde la democracia como la conocemos está siendo avasallada.
Donde el Congreso solo funciona si es para aprobar proyectos oficialistas, sino serán vetados por el presidente, como el magro aumento a los jubilados que impacta un 0,16% en el PBI, mientras los intereses que se pagan al FMI son de 4,8%. Un país que se maneja por el DNU 70/23 dejando cada vez más obsoleto al poder legislativo, avanzando hacia la autocracia.
El autoritarismo avanza con la apaleada cada miércoles a las jubiladas y jubilados. Avanza en tratar de amordazar la palabra que manifiesta el periodismo crítico. Avanza porque quieren un país para pocos con salud y educación privada y elitizada donde solo accedan aquellos que puedan llegar.Donde los Garrahan o Bonaparte sobran y por ende médicxs, enfermerxs y otrxs imprescindibles. Un país para pocos donde solo prevalezcan los fuertes, donde los minusválidos, enfermos y pobres sobran. Donde soberano o soberanía son malas palabras para esta caterva de oligarcas. Esas bellas palabras que defienden todos lo días fueguinos y fueguinas que trabajan en aquel “fin del mundo” que no es otro que un principio de muchas cosas buenas para el país.
Pero nos podrán reprimir, perseguir, encarcelar y eliminar derechos conquistados, pero no podrán con la marcha de los pueblos que levantan la frente en las peores adversidades. Porque a pesar del los fusilados y bombardeados, del dolor, la sangre y los 30.000…no pudieron, ni podran!!
Y no podrán porque los pueblos, aún con sus aciertos y errores, siempre vuelven y es deber de la militancia verdaderamente nacional, popular y revolucionaria, tratar de ser mejores para no volver atrás, pero sobre todo para no cometer los mismo errores y poder ir más allá, hacia la felicidad de los pueblos con un país liberado que albergue y protagonicen los más humildes, la clase trabajadora y todxs aquellxs que abrazan la democracia grande.
