Claudia tenía 53 años y había sido vista por última vez el 1 de marzo en su casa de Mar del Plata. Sufría violencia de género por parte de su ex pareja Ricardo Rodríguez, de quien había decidido separarse siete meses atrás.
Desde la mañana del 2 de marzo, cuando Claudia no se presentó a su trabajo, su familia radicó la denuncia y comenzó una intensa búsqueda para encontrarla con vida. El principal sospechoso por su desaparición era Rodríguez, a quien tampoco se lograba encontrar.
«Lo voy a hacer, hoy estuve pensando. Necesito plata, necesito vivir en un lugar mejor, cerca del centro y que este hijo de puta no me moleste más. Escucho un ruido y parece que es él, que me va a golpear la mano de vuelta. No quiero ni prender la luz del patio. Me voy a salir escondida. Fabi, te quiero. Si vengo y te veo en línea te cuento, si no te cuento mañana”, le había dicho Claudia a una amiga, a través de un audio antes de desaparecer.
Los familiares de Claudia venían denunciando el abandono de la búsqueda para encontrar a Claudia con vida, alertando que no se estaban realizando rastrillajes.
En la marcha del 9M las calles de Mar del Plata se pedían por la aparición con vida de Claudia y mayor despliegue Estatal para poder encontrarla.
Rodríguez fue detenido ayer por la noche por los hijos de la mujer desaparecida.
Amigos de sus hijos que recorrían el barrio en búsqueda de Rodríguez, alcanzaron a reconocerlo, por lo que llamaron de inmediato a los hijos de Repetto para que confirmaran si se trataba del prófugo.
El femicida se encontraba a tan sólo seis cuadras de la casa de Claudia andando en bicicleta. Al llegar los hijos de Claudia, Rodríguez intentó escapar pero lograron alcanzarlo y reducirlo, tras lo cual dieron aviso a la Policía.
Ricardo Rodríguez confesó el femicidio e intentó justificarse explicando que se puso “celoso” y que, luego del crimen, intentó “revivirla”. Según el círculo íntimo de ella, Rodríguez la hostigaba después de haberse separado.
«Es una vergüenza que lo hayan detenido los hijos, esta persona estaba en una bicicleta y la policía no hizo nada para atraparlo; es una burla» reclamó Noelia Agüero, abogada de la familia. «Les tuve que informar yo a los hijos, familiares y allegados de que estaba muerta, eso originó los incidentes y la represión» agregó.
