El proyecto de Ley de Presupuesto plantea recortes en todas las áreas del gasto público para aumentar únicamente los fondos destinados a los pagos de intereses de la deuda externa. Pero, dentro de los recortes, un rubro sufre una de las podas más importantes: son las transferencias de fondos a las provincias. Las Transferencias destinadas a los Gastos Corrientes de las provincias se reducen un 38,8% con respecto al 2018, y las Transferencias de Capital destinadas a obra pública caen 34,5%.
Si se suman los recortes de 2018 y los de 2019, las provincias sufrieron un ajuste de $202.000 millones, lo que equivale a un 1,1% del PBI. Dentro de las transferencias corrientes, Educación pierde un 35,9% con respecto a 2018, Desarrollo Social un 29,4% y Salud un 17,9%. Y dentro de las Transferencias de capital, Transporte retrocede 66,1%, Energía 63,4% y Vivienda 47,8%.