«El ámbito paritario es el de negociación. El SUTE fue el único sindicato en la provincia que rechazó la miseria educativa» explica Lorena Gordillo miembro del Secretariado Ejecutivo del Sindicato Unido de Trabajadores/as de la Educación (SUTE) en la entrevista. Los docentes mendocinos vienen de una larga lucha en el 2020. Con el nuevo ciclo lectivo volvieron a la carga: paros, masivas movilizaciones y una carpa educativa por la reapertura de paritarias. Exigen que se respeten los acuerdos firmados y tratados en las reuniones de paritarias no salariales. «Como la puesta en marcha de la licencia por violencia de género y la resolución 60/21. No queremos más cierres de cursos ni de divisiones. Es necesario que la presencialidad garantice elementos de bioseguridad y en donde el aprendizaje sea lo central». Este lunes 29/3 se reabren las negociaciones con el gobierno provincial.
— ¿De dónde vienen y cómo llegaron al acampe?
— Nosotros y nosotras llegamos al acampe luego de protagonizar 48 horas de paro decidido en un plenario provincial del SUTE. Luego se hicieron asambleas. Se dio un proceso de asambleas en cada escuela, en cada unidad de trabajo. Y bueno, lo que se entendió, y desde el secretariado acompañamos, fue la realización de la carpa. Una carpa que entendemos es para poner en escena de nuevo todas las reivindicaciones que tenemos y para prepararnos en una lucha más profunda. Nosotros entendemos que las medidas de lucha por excelencia, combinada con otras medidas, es el paro.
— ¿Cuáles son los puntos centrales del reclamo?
— Los puntos centrales del reclamo desde ya es la reapertura de la paritaria, que fue cerrada por el gobierno luego de que tuvieran que sentarse a hablar y negociar en el ámbito paritario por exigencia de la Justicia. Luego de un amparo que presentamos desde el sindicato. Cada vez los reclamos se van profundizando y se van diversificando. Uno es la recomposición salarial, producto también del aumento de la inflación y de una canasta familiar acá en Mendoza de $ 53.200. Sin embargo un sueldo inicial es de $ 27.500 (y el de los celadores ronda los $ 20.000). Entendemos que este es uno de los principales reclamos.
Pero este reclamo se da en el marco de un contexto sanitario de avance de una pandemia y en donde cada vez está más a la vista el regreso o el retorno a una segunda ola. A falta de un mapa sanitario y epidemiológico del gobierno, que explicara en qué situación estaban las escuelas, desde el sindicato lo que hicimos fue encargárselo a un grupo de epidemiólogos independientes que recogen las inquietudes de los sectores populares. El informe mostró que, para la zona del Gran Mendoza (llamada “zona metropolitana”, incluida Lavalle y el Valle de Uco), las clases no podían iniciar. No obstante esto, las clases iniciaron. No de manera normal porque el 1 y 2 de marzo hubo paro. Por eso otro de los puntos es volver a una presencialidad cuidada y segura. Los insumos siguen faltando, hay casos de covid de docentes. Hace poquito falleció una compañera que estuvo internada, se le complicó con covid por una cuestión respiratoria, y falleció. Entendemos que esta es una víctima de la inacción y la impericia de este gobierno.
— ¿En la provincia se aplica la resolución que exime del trabajo presencial al adulto cuando tienes hijos menores a cargo y la escolaridad les toca virtual?
Es otro de los reclamos, que se ponga en marcha y se acate la resolución 60/21 para los trabajadores de la Educación. Frente a esto estamos haciendo también un reclamo legal, a través de nuestros abogados y abogadas. Pero más que nada queremos visibilizar que en un sindicato donde el 80% somos mujeres. O sea, con las tareas de cuidado nosotras tenemos una triple jornada laboral. El gobernador salió a decir que es una resolución para el sector privado.
Por otro lado, un logro que fue muy interesante es que la Asociación de Papás y Mamás de Chicos y Chicas con Discapacidad, junto con el SUTE, hicimos una convocatoria en el edificio de la Casa de Gobierno, justo donde funciona la DGE, y se logró la aplicación de la 60/21 para papás y mamás de chicos con discapacidad. Esto da cuenta de que si nos organizamos se pueden conseguir cosas que beneficien a las familias de los estudiantes y de las trabajadoras y los trabajadores de la Educación, que garanticen derechos y que pongan en escena también que no podemos seguir peleando y luchando por andariveles separados.
— Este lunes 29/ se reanudan las instancias de diálogo con el gobierno, ¿Qué perspectivas tienen y cómo ven que va a continuar el proceso?
—La lucha da sus frutos. El próximo lunes convocamos a los docentes a Casa de Gobierno. En la reunión el SUTE pediremos retomar las instancias paritarias (acá en Mendoza se divide entre paritaria salarial y paritaria no salarial). Están pendientes debatir condiciones laborales, condiciones de titularizaciones. Rechazamos los cierres de la modalidad de jóvenes y adultos, negándoles el derecho a la educación. Rechazamos la miseria educativa que nos querían dar. “Educativa” decimos no solamente en términos salariales sino también en términos de las condiciones edilicias, porque acá seguimos con escuelas que no están, no salen en los medios. Mendoza es una provincia gobernada por la alianza Cambiemos. El gobernador Suárez tiene pleno acuerdo con los designios del gobierno nacional de Trotta.
Es necesario hacer una campaña nacional de visibilización y de lucha para que se vea que en nuestro país no están dadas las condiciones. No podemos vender ni intercambiar nuestra salud a cambio de míseros salarios, ni tampoco de presencialidades que solamente son para la foto, y que luego se suspenden las clases, ya sea por casos de covid o porque los edificios no están en condiciones. Tenemos mucha esperanza, una esperanza colectiva de poder lograr aquellas reivindicaciones que necesitamos los trabajadores y trabajadoras de la Educación.