Mauricio Melian, Sec. Adjunto del Sindicato de Trabajadores de Talleres y Astilleros Navales (SITTAN), resumió en diálogo con el MUS la situación que viven los dirigentes sindicales a dos años de la persecución política y sindical que implementó desde su asunción el gobierno macrista, con la estrecha colaboración de un sector del poder Judicial por una huelga que encabezaron en reclamo de la reincorporación de 30 trabajadores despedidos.
¿Qué es Tandanor?
-Tandanor es un Astillero que tiene sus instalaciones en la Costanera Sur de la Ciudad de Buenos Aires y se dedica a la reparación y construcción de buques, tanto nacionales como extranjeros. A partir del año 2005, mediante el Decreto 315 promulgado por Néstor Kirchner, pasó a ser una empresa con un 90% de propiedad estatal, quedando a cargo del Ministerio de Defensa, y un 10% de los trabajadores.
¿Qué implicó el Decreto 315 para los trabajadores?
-El astillero Tandanor es la expresión de los diferentes períodos que atravesó el país en las últimas tres décadas. Fue una de las tantas empresas estatales privatizadas durante el menemismo, con una administración privada que terminó con la quiebra de la empresa y que solo se mantuvo de pie por el ímpetu y la lucha de sus trabajadores. Por lo que el decreto no solo significó la estatización del astillero, sino también recuperar importantes niveles de actividad, con una capacidad de construcción y reparación de buques, pero sobre todo formación de jóvenes a través de escuelas de formación profesional empleadas por el Ministerio de Trabajo.
¿Cuándo llegan a la conducción del Sindicato de Trabajadores de Talleres y Astilleros Navales (SITTAN)?
-Yo ingreso a Tandanor en el año 2004, a través de un curso de formación y capacitación del Ministerio de Trabajo; y en el 2008 junto a otros compañeros conformamos la Lista Celeste y Blanca y nos postulamos para disputar la conducción del sindicato.
Nosotros, teniendo alrededor de 22 y 23 años, ganamos las elecciones y pasamos a conducir el sindicato, recuperando muchas de las conquistas perdidas por los trabajadores: paritarias libres, un Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) que ampliaba derechos para los trabajadores, incrementos en el valor de las horas extras, licencias especiales, plus vacacional, recategorizaciones… O sea, logramos un convenio beneficioso y gratificante para los trabajadores.
Y hasta fines del 2015 ¿cuántos trabajadores tenía el Astillero Tandanor?
-Hasta diciembre del 2015 el astillero contaba con 610 trabajadores. Antes se iba un trabajador del astillero por cualquier motivo y la vacante se cubría, porque cada trabajador tiene sus funciones dentro de la planta según el CCT.
Con la llegada del Macri al gobierno y de Arosa y compañía al Directorio de TANDANOR eso ya no fue así. Hubo despidos, persecución y caída de los índices de productividad debido al vaciamiento y a la falta de profesionalidad de los directores de aquel entonces para conseguir proyectos genuinos que alimenten al astillero.
¿Qué implicó para el astillero la asunción de Cambiemos?
-Lamentablemente, con la asunción de Mauricio Macri como presidente de la Nación, asumió un nuevo directorio que de Industria Naval no entendía nada. Un desconocimiento terrible sobre lo que significaba conducir un Astillero de renombre internacional, pero con una clara política de vaciamiento e intento de reducir los niveles de actividad de Tandanor. Algo que se replicó también en Astilleros Río Santiago bajo la órbita del gobierno de María Eugenia Vidal. La idea era tornar al astillero inviable.
Para ejemplificar lo que fue su política y gestión siempre digo que ellos se encontraron con una familia integrada por 10 miembros, ante su incapacidad de conseguir comida y sustento para los 10 decidieron matar a 6 y alimentar solo a 4. Eso se debió a su incapacidad profesional, empresarial y política de generar recursos para el conjunto del astillero.
¿Y para los trabajadores?
-Para los trabajadores implicó un cambio rotundo, intentaron permanentemente no cumplir con el Convenio Colectivo de Trabajo, suprimieron las paritarias libres. Implicó pérdida de trabajo de más 120 familias. Implicó persecución política y judicial a los miembros del sindicato con procesamientos, imponiendo medidas cautelares para que los dirigentes no podamos ingresar a la empresa que aun lamentablemente persisten, buscando disciplinar de esta manera al resto de los trabajadores ante previsibles reacciones.
Por ejemplo, de ser 610 trabajadores construyendo barcazas, remolcadores y cualquier tipo de embarcación pasamos a ser menos de 450 reparando dos o tres pesqueros. Fueron eliminando la mano de obra productiva pero también la intelectual. No se desprendieron de una secretaria, sino de torneros, soldadores, caldereros e ingenieros con conocimientos que requieren una larga formación. De comprar toneladas de chapa para la construcción y reparación de buques, a un astillero desierto. Ellos tenían un plan y en gran medida lo cumplieron en desmedro de los trabajadores.
¿Cuál fue la reacción del SITTAN ante estas políticas de vaciamiento que incluyeron despidos?
-Desde el sindicato teníamos dos caminos: hacer la plancha o representar a los trabajadores como debe hacer un sindicato. Optamos por esta última opción y ahora estamos con un pedido de desafuero y denuncias penales.
Ante la crítica situación y desmanejos del Directorio saliente desde el SITTAN realizamos una presentación a Presidencia de la Nación detallando los puntos por los cuales exigíamos explicaciones:
La venta de un dique flotante sin el consentimiento de los trabajadores, que poseen el 10% de la empresa. Lo vendieron diciendo que estaba en desuso, lo compró otra empresa y hoy está funcionando.
Contrato con la empresa de Autopistas Urbanas por la utilización de terrenos de Tandanor como obrador para la construcción del Paseo del Bajo. Pedimos a la empresa que nos muestren el contrato para ver los pormenores del mismo y no lo hicieron. Parte importante de esa construcción fue adjudicada a IECSA, empresa que pertenecía a Ángelo Calcaterra, primo de sangre de Mauricio Macri.
Por la reparación de sillas de ruedas a partir de un contrato tripartito suscripto entre el PAMI, la empresa y el Ministerio de Defensa, que nunca las reparamos y que cuando hicimos la denuncia trasladaron las sillas a otro galpón.
Por el proyecto OPV, para la construcción de lanchas patrulleras oceánicas multipropósito, que tanto Tandanor como Astilleros Río Santiago estaban en condiciones de construir. Finalmente, el Gobierno decidió comprarlas en Francia, donde adquirió cuatro lanchas por el valor declarado de 324 millones de dólares y por la evidente mala gestión del Directorio de la Empresa.
¿Cómo se origina el conflicto que desemboca en los pedidos de desafuero?
-Veníamos de ganar las elecciones, por más del 70% de los votos de los afiliados. El Directorio de ese entonces disgustado por el triunfo -ya que pensaban que democráticamente podían apartarnos- a los 30 días despidió a 23 compañeros, en su mayoría integrantes de la Juventud Naval y militantes. Inmediatamente convocamos a una asamblea de todo el Astillero y por el voto de los trabajadores se declaró la huelga como medida colectiva. Ese mismo día, junto al apoyo de los trabajadores, se resolvió acampar bajo el nombre de la «Carpa de la Unidad Naval» en la puerta del Astillero, recibiendo la solidaridad de los sindicatos enrolados en la FEMPINRA (Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina) como así también de la CTA Autónoma, CTEP, la CFT y otros de la Multisectorial 21F.
Como respuesta la empresa decide judicializar la protesta e iniciar denuncias penales por coacción y amenazas en Comodoro Py. También pidieron la exclusión de tutela sindical a seis miembros de la Comisión Directiva que el día del conflicto ingresamos a la oficina a pedir explicaciones de por qué no se cumplieron los pasos previos a todo despido. Despidos que fueron inoportunos, injustificados y arbitrarios.
En una maniobra hábil denunciaron amenazas y lesiones de todos los integrantes de la comisión que ingresaron al Directorio, era la única forma de dejarnos afuera del astillero y poder así llevar su plan de vaciamiento.
¿Cuál es el estado actual de las causas?
-En el ámbito penal las denuncias se encuentran en Comodoro Py. En primera instancia hemos sido procesados de tres a diez años por el juez Luis Rodríguez, resolución que fue apelada por nuestra parte logrando en segunda instancia un sobreseimiento. Esta última sentencia fue apelada por el Directorio macrista a días de su salida de la empresa Tandanor. Hace unos días el Tribunal de Casación en lo Penal remitió las actuaciones a Luis Rodríguez (primera instancia) para que vuelva a fallar nuevamente debido a las contradicciones legales y de interpretación que se dieron en las instancias anteriores.
En el ámbito laboral, lamentablemente 3 de los 6 compañeros de Comisión Directiva fueron desaforados por el juez Luis Ramonet, Juzgado n° 69 injustamente. El restante de los dirigentes aún no tenemos fallo de primera instancia y nos encontramos en la instancia de prueba. No nos damos por vencidos en ningún momento.
Los directores macristas pensaron que íbamos a renunciar por miedo y no, acá estamos, luchando.
Lo que no pudieron democráticamente lo trataron de hacer judicialmente y políticamente. Contaron con herramientas para hacerlo y supieron usarlas, más teniendo en cuenta el momento que atravesaba el país en donde la persecución era moneda de cambio. Hoy el contexto político es otro y es por eso mismo que requerimos el desistimiento de estos procesos de exclusión de tutela que están manchados de persecución política y judicial ejercida por un gobierno que solo ataco a los trabajadores y a sus representantes cuando estos solo buscaban defender los derechos e intereses de sus representados.
“no solo se debe terminar con este pedido de desafuero sino que se debe reivindicar la lucha que se dio”
Ante esta situación, ¿cuáles son los pasos a seguir y que es lo que solicitan?
-El camino es viralizar la situación. Sabemos que si hay un rasgo que caracterizo al gobierno de Mauricio Macri fue su política antisindical, perseguir a los representantes que, en forma correcta, defendieron los derechos de los trabajadores o cuestionaron a los directivos de una empresa que ajusto y no cumplió con sus obligaciones y responsabilidades.
Como Secretario Adjunto he participado de diferentes plenarios de la Corriente Federal de Trabajadores, de la FEMPINRA, del Frente Sindical para el Modelo Nacional, de la CGT regional de Lomas de Zamora –la cual integró-, para visualizar el conflicto e impulsar una amplia unidad y solidaridad ante el pedido de desafuero.
Creemos que la situación y el contexto político es otro y que no solo se debe terminar con este pedido de desafuero sino que se debe reivindicar la lucha que se dio. Lo único que hicimos fue cumplir con nuestras funciones defendiendo a los trabajadores, sus derechos e intereses y eso molesto mucho. Éramos un claro obstáculo a su política neoliberal de ajuste y vaciamiento del astillero. Solo con observar las bajas que se dieron en el astillero sabrán de lo que estoy hablando
¿Algún mensaje a los compañeros?
-Nosotros, ante todo, somos trabajadores y queremos lo mejor para nuestro Astillero. Es nuestra segunda casa. Hemos pasado más horas con los compañeros que con nuestra propia familia. Una política de paso no va a destruir todo lo construido durante años. No lo vamos a permitir y vamos a seguir trabajando para que se haga justicia.
Sabemos que los directores anteriores emplearon la persecución política y sindical para callarnos. Vinieron a generar miedo en los trabajadores y la forma de generar ese miedo fue ajustando y persiguiendo a los representantes gremiales que justamente son los que deben brindar seguridad a los derechos de los trabajadores.
Hoy en día la situación es otra, con la llegada de Alberto y el cambio del Directorio en TANDANOR vemos como de a poco el Astillero se está reactivando, es bueno enterarse que las instalaciones de Alte. Storni vuelven a tener movimiento, es gratificante enterarse que hay muchos proyectos que se están firmando o están por concretarse.
Y digo que es gratificante porque justamente es lo que queremos para nuestro TANDANOR, hemos trabajado y defendido no solo los intereses de los trabajadores sino también los de la empresa y es por este justo motivo que pido el apoyo, la solidaridad de todo el movimiento obrero para poder revertir esta situación en la cual fuimos injustamente puestos por un gobierno neoliberal como el de Mauricio Macri que solo podía lograr ajustar, despedir y vaciar al astillero de una sola forma, PERSIGUIENDO POLITICA Y JUDICIALMENTE a más de la mitad de la Comisión Directiva del SITTAN.